La capacidad de la planta, que debería entrar en servicio muy pronto, es de 275.000 metros cúbicos, 150.000 para consumo alimentario y 125.000 para riego de las 13.600 hectáreas de plantaciones situadas cerca de Agadir al día durante la primera fase, con la perspectiva de que esta capacidad pueda alcanzar 400.000 metros cúbicos de agua desalada al día a largo plazo. La empresa española Abengoa será responsable del desarrollo, construcción y mantenimiento de la planta durante al menos 27 años.

A la espera del anuncio de la fecha oficial de inauguración de la nueva estación, los medios de comunicación emiratíes todavía nos informan que un videoclip difundido recientemente en las redes sociales documenta el momento en que los ingenieros y trabajadores marroquíes celebraron el éxito de la prueba de fase relacionada con este enorme proyecto. Este proyecto, con un coste total de 4.410 millones de dírhams marroquíes (aproximadamente 493 millones de dólares estadounidenses), se enmarca dentro de los objetivos del plan marroquí para la diversificación de las fuentes de abastecimiento y seguridad del agua, en el marco del Programa Nacional de Abastecimiento de Agua Potable y Riego 2020-2027.

La nueva estación pretende dotar de agua potable a más de 6.600.000 personas. La nueva planta, que se extiende sobre una superficie de 20 hectáreas, contribuirá también a potenciar la actividad agrícola en las zonas agrícolas de la región de Souss-Massa y su capital, Agadir, en particular la llanura de Chtouka, abasteciéndola en riego agua, para suplir el déficit resultante del registrado a nivel de capa freática, estimado en 90 millones de metros cúbicos por año.

La región «Chtouka Ait Baha» de la región de Souss-Massa, que es una de las áreas que serán cubiertas por el programa de abastecimiento de agua de riego de la nueva estación, es una de las más agrícolas. de Marruecos, porque por sí sola produce el 65% de las exportaciones marroquíes de hortalizas y frutas, en una superficie de hasta 15.000 hectáreas, lo que ha requerido la búsqueda de nuevos recursos hídricos para mantener el sector agrícola de la región.

En enero de 2020, Marruecos lanzó un programa nacional para el suministro de agua potable y agua de riego 2020-2027, que tiene como objetivo apoyar y diversificar las fuentes de agua y desarrollar el suministro de agua, en particular mediante la construcción de más presas y la reutilización de aguas residuales para riego, además de la exploración de aguas subterráneas y la instalación de plantas desaladoras.

El Reino cuenta actualmente con cuatro estaciones desaladoras de agua de mar en las ciudades de El Aaiún, Boujdour, Tan-Tan y Sidi Ifni, a las que próximamente se sumarán las nuevas estaciones de Agadir (144 millones de metros cúbicos de agua al año) y Alhucemas (con una capacidad de 6 millones de metros cúbicos de agua por año), mientras que otras plantas desaladoras deben completarse en las ciudades de Casablanca (2027), Safi y Dakhla. También hay planes en el futuro para construir una nueva planta en Dakhla y aumentar la capacidad de las plantas desaladoras existentes en Laâyoun, Tan-Tan y Sidi Ifni.

El gobierno marroquí tiene previsto instalar una planta desaladora de agua de mar con una capacidad de 300 millones de metros cúbicos en la capital económica Casablanca, para 2027, según el plan nacional de desarrollo del suministro de agua del país.

El ejecutivo invertirá 9.500 millones de dirhams en este proyecto, y la estación será construida en asociación entre los sectores público y privado.

Además, para 2050, Marruecos pretende alcanzar una capacidad total de 1.000 millones de metros cúbicos de agua de mar desalada y reutilizar hasta 345 millones de metros cúbicos de aguas residuales al año (actualmente se reutilizan entre 40 y 50 millones de metros cúbicos).

Fuente: MaritimeNews