“Estos incentivos demuestran el compromiso del Estado de apoyar la agricultura marroquí en su segunda fase de desarrollo. La ambición es hacer del sector agrícola una palanca prioritaria para el desarrollo socioeconómico en Marruecos. De hecho, la estrategia Al Jayl Al Akhdar otorga un lugar privilegiado al desarrollo de los sectores agrícolas», explica Today Le Maroc, y añade que esto implica acelerar el desarrollo de los productos agrícolas, la aparición de nuevos sectores con un gran potencial, el apoyo a la competitividad de exportaciones así como el mantenimiento del esfuerzo inversor y la racionalización de los incentivos upstream.
Cabe señalar que el sistema de ayudas agrarias puesto en marcha propone la introducción de nuevas ayudas de acuerdo con los compromisos adquiridos en los contratos programa suscritos entre el Estado y las interprofesiones de los principales sectores productivos, así como el refuerzo de las ayudas asignados bajo determinadas rúbricas, sin olvidar el estímulo y el fuerte incentivo a la agregación.
Cabe recordar que la participación de la agricultura en el presupuesto de inversión pública ha sido limitada durante mucho tiempo, lo que repercutió en la productividad de este sector y, en consecuencia, en los ingresos de los agricultores. “Los créditos acumulados abiertos a través de los presupuestos generales del Estado (BGE) alcanzaron los 81.000 millones de dírhams en el marco del Plan Marruecos Verde. Los recursos aumentaron de 1.600 millones de dirhams en 2008 a 10.300 millones de dirhams en 2019. El 91% de los recursos movilizados anualmente con cargo a los presupuestos generales del Estado se ejecutan a nivel regional, es decir, un monto acumulado de 72.500 millones de dirhams entre 2008 y 2019”, explica también el diario.
Se destaca que esta dinámica de inversión ha contribuido a restablecer el equilibrio del financiamiento en el sector agropecuario en vista de su contribución a la creación de riqueza nacional, empleo y seguridad alimentaria. “Este esfuerzo también ha permitido desarrollar infraestructura productiva, ampliar los esquemas de incentivos para alentar a los agricultores a modernizar y equipar sus fincas, pero también ha tenido un efecto dominó en el sector privado, habiendo drenado casi el 60% de la inversión total. esfuerzo en el sector agrícola. En 10 años de despliegue del Plan Marruecos Verde, el sector agrícola ha acumulado 104.000 millones de dírhams de inversión, incluidos 63.000 millones de dírhams del sector privado (61%) y 41.000 millones de dírhams del público (39%)”.
También cabe señalar que la inversión pública se ha dirigido principalmente a la infraestructura productiva, en particular la infraestructura de riego e hidroagrícola (60%), la agricultura solidaria (15%) y el desarrollo de los sectores productivos (13%).
Fuente: Le360