Ryad Mezzour, ministro de Industria y Comercio, señala que la industria ha recuperado al completo los puestos perdidos por los trabajadores
El ministro de Industria y Comercio, Ryad Mezzour, ha concedido una entrevista al periodista estadounidense Dennis Wholey, en la que ha afirmado que Marruecos está en una muy buena situación económica y que los trabajadores del sector industrial han podido recuperar su trabajo. Esto se debe a que la pandemia del coronavirus afectó mucho al sector, pero ahora se han empezado a recuperar y en este momento se encuentra al 100%.
La pandemia del coronavirus devastó el mercado del trabajo en casi toda su totalidad, obligando al cierre de empresas y la búsqueda de otros métodos de trabajo. Sectores como el industrial requieren de una presencialidad para su funcionamiento que en tiempos de confinamientos es muy difícil de sostener y los trabajadores toman riesgos a la hora de futuros contagios. Antonio Guterres, secretario general de la ONU, llegó a afirmar sobre esta situación que “la COVID-19 nos puede atrasar años, incluso décadas, dejando a los países con retos fiscales masivos y crecientes”. Por suerte, Marruecos ha podido encontrar la estabilidad en el sector industrial, recuperando cada vez más la normalidad pérdida de hace casi dos años.
Mezzour ha hablado también de las características que tiene la industria del Reino y ha resaltado lo importante que es para la economía nacional. Según afirma el ministro, la economía se basa en el consumo y la inversión, y este primero representa el 60% del PIB (Producto Interno Bruto). La inversión, por otra parte, supone un 30% del PIB, y se considera que Marruecos tiene una de las tasas más altas del mundo.
Volviendo al tema de la industria, el ministro ha afirmado que la principal actuación de Marruecos en el sector industrial es la producción y la subcontratación, además de la externalización de empresas extranjeras que vienen a Marruecos.
En el reino alauí, la principal industria que encabeza el ranking de las que más productos exportan es la automotriz, que cuenta con una capacidad de producción al año de 700.000 vehículos y, a su vez, una tasa de integración de un 60%.
Principalmente, según palabras de Mezzour, el país alauí importa energía. El ministro habló de la importancia de las políticas de transición energética que vive el país con el nuevo Gobierno, que se ha convertido en una de las naciones líderes en estos asuntos. “Importamos también algunos equipos, semiproductos industriales y algunos bienes de consumo”, según ha contado el ministro. Por otro lado, las principales exportaciones se dan en el sector de los vehículos, seguido de fertilizantes, productos agroalimentarios y procesados y textiles.
Cabe destacar que Marruecos tiene una excelente relación internacional con distintos países a los que importa y exporta, como es la Unión Europea o Estados Unidos, uno de sus principales socios. El Reino es el único país de África que posee acuerdos de libre comercio con Estados Unidos desde hace 16 años, por lo que se ha permitido que los dos países comercien y realicen acuerdos de venta e importación. Aparte, esta situación es muy estratégica para la potencia americana, que, al tener trato con el país magrebí, puede acceder a los demás países del continente africano para expandir sus negocios y poder.
Wholey, ante este hecho, le preguntó al ministro que cuáles serían las principales ventajas para los inversores estadounidenses que deseen realizar acuerdos sobre sus negocios con Marruecos, a lo que el ministro respondió que “la principal ventaja es que los costos de producción son relativamente bajos, la descarbonización de las industrias marroquíes acabará en un plazo de 3 a 4 años, y permite el acceso a los dos mercados más grandes del mundo, al europeo y americano”. “Estar basado en Marruecos, te da un crecimiento potencial multiplicado por tres. Marruecos es un centro para los mercados europeos, estadounidenses y africanos”, respondió el ministro.
Este factor es muy bueno para la región, y, sobre todo, para los países africanos que quieran invertir en el Reino y así, abrir la puerta al mundo. Marruecos ofrece una estabilidad política, social y económica que es envidiada por sus vecinos africanos y que dotan de un carácter formal al Magreb, por lo que resulta muy importante a la hora de crear negocios en el continente. Desde el 2019, Marruecos es el 4ª país de la región MENA que más atrae a la inversión extranjera, con muy buenas estrategias que alientan la inversión y hacen crecer la economía de la nación.
Fuente: Atalayar por Jorge Ortiz